Cada momento que se nos da es un regalo precioso de Dios. Si bien no siempre tenemos el control de lo que nos sucede, podemos optar por tener una mentalidad agradecida y vivir cada momento lleno de alegría, confiando y creyendo que Dios está cumpliendo el propósito final de nuestra historia. En , la maestra de la Biblia y autora número uno en ventas del , Joyce Meyer, le alienta a tener un corazón bondadoso que guíe sus acciones y reacciones a diario. Vivir con una actitud de agradecimiento a la vez que lo expresa con regularidad no solo le ayuda a darse cuenta de cómo Dios está obrando en su vida, sino que también le quita las cargas y le da una nueva perspectiva. Practicar activamente la acción de gracias es la clave para liberarse de la amargura y el fracaso, y le lleva a abrazar lo mejor que Dios tiene para usted. Lleno de estímulo edificante y sabiduría práctica, le prepara para vivir cada día con el conocimiento de que Dios dispone todas las cosas para su bien, siempre.